MD5 es como una huella dactilar para los humanos. La huella dactilar es un pequeño fragmento de datos que identifica de forma única un cuerpo muy grande (humano). Lo mismo se aplica al algoritmo hash MD5: un número pequeño (de solo 32 caracteres de longitud) puede identificar de forma única un archivo muy grande.
MD5 es un algoritmo informático que devuelve un número único y pequeño para cualquier contenido (cadena, archivo de texto, imagen, archivo de vídeo, etc.). Si el contenido cambia al menos en un carácter, el número MD5 será diferente. Es casi imposible obtener el mismo número MD5 para dos contenidos diferentes.
Se puede calcular el MD5 para cualquier texto o archivo, pero se necesitan algunos recursos informáticos para hacerlo. Por lo general, el cálculo del MD5 para un archivo grande puede ocupar hasta el 50 % de los recursos del procesador. Puedes intentar y divertirte generando el MD5 para cualquier texto, haz clic aquí .
Una gran ventaja de MD5 es que, para el contenido que no se modifica, el número MD5 devuelto siempre será el mismo. Por eso, cuando se busca el contenido de un archivo, basta con conocer su "huella digital", es decir, el número MD5, para poder encontrar cualquier archivo con el mismo número MD5 y garantizar que el contenido de ambos archivos coincida al 100 %. Si cambia incluso un byte, cambia todo el número MD5.
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